13.12.07

Fraude 2006, el Documental Mexicano Con Mayor Taquilla en la Historia


´´López Obrador estaba más interesado en parar la violencia que en impedir el fraude: Mandoki´´

Sergio Raúl López


La masa humana oculta las diferencias raciales. Las manos levantadas, que aplauden o saludan, siempre ofrecerán el indistinto, indiferenciado, color de la piel humana. Lo mismo en un concierto masivo de rock ofrecido por The Police o The Cure, que en un encuentro de futbol en un estadio lleno o en una multitudinaria manifestación política. Siempre sentiremos esa misma calidez de tonos, esa humedad casi visible, que los cuerpos multiplicados exhalan mediante sudores, humores y la propia respiración.

El vendaval de protesta debió ser magnífico. Provenía de aquella masa que se levantó para manifestar el desacuerdo contra el resultado de las elecciones presidenciales del 2 de julio del 2006 en la que ha sido la manifestación pública más concurrida de la historia de México. Las cifras de los asistentes, veleidosas, variarán de un actuario al otro –dependiendo sus filiaciones o las de sus superiores–, pero las imágenes muestran ese inabarcable tono color carne desplegado por la Plaza de la Constitución y todas las calles aledañas del Centro Histórico de la Ciudad de México.

Masivo, de millones, fue en su momento el apoyo que recibió Andrés Manuel López Obrador en el largo y entrampado conflicto electoral. Pero la movilización de millones de ciudadanos, la gran protesta pública, no varió un ápice la resolución inicial. El desenlace, empero, no podía preverse.

A diferencia de la versión informativa única, homogénea que noticiarios y comentaristas televisivos ofrecieron en torno a las elecciones, existió la antítesis del Gran Hermano orwelliano. No los zafios programas televisivos llenos de nimiedades que toman tal título. Sin las cientos de miles de cámaras caseras, accionadas por ciudadanos de todo tipo que documentaron un variado catálogo de trampas y mañas tanto legales como ilegales para mantener el resultado de la contienda.

Esas, que conforman más de tres mil horas de testimonios grabados, dan cuerpo al filme más reciente de Luis Mandoki........

SR-Hay gente que le acusa de ser muy cercano de López Obrador, a la Presidencia Legítima y a la Convención Nacional Democrática.

LM-Al mismo tiempo lo que yo digo es que los medios son muy cercanos a la corrupción. ¿Me hablan a mí de sesgo, se atreven a decirme que soy sesgado? ¡Qué poca madre!, ¡qué nivel de cinismo! No hay más sesgo que el de Televisa y TV Azteca, ¡por favor! Si ofrezco un punto de vista que los contradice claro que me van acusar porque los estoy poniendo en evidencia, en realidad ni siquiera hubiera hecho la película si ellos le hubieran abierto su tiempo de televisión a hablar con López Obrador desde un punto de vista real y no difamatorio. ¡Son unos difamadores!

SR–No sólo por la campaña de odio, hubo telenovelas y programas humorísticos que tomaron partido...

LM–Sus noticieros y todos sus programas. Entonces, lo que yo les digo es qué poca vergüenza.

SR–A tu persona y a otros intelectuales y creadores que denunciaron las irregularidades de la elección presidencial se les atacó, insistentemente, de buscar un hueso, un puesto en el gobierno de López Obrador.

LM–Si me interesara un hueso no me hubiera dedicado al cine. ¿Tú crees que voy a dejar el cine por un puto hueso? No soy pendejo. La gente se está proyectando, los que me acusan son los que buscan un hueso, eso para mí sería un fracaso. Llevo un año y medio más trabajando en esto y no he cobrado un peso. Estaba pasmado, medio paralizado por lo que pasó y el 4 de julio se me ocurre cubrir el conteo parcial, no teníamos gente ni dinero y se me ocurrió invitar a la gente por Internet para que acudiera con sus cámara caseras. Para nuestra sorpresa se cubrieron los 300 distritos electorales, toda esta gente con la mejor voluntad y devoción democrática nos mandó todo el material, sin copia, nos regaló los originales. Yo siento una gran responsabilidad, tengo que responder.

Durante el plantón viví un momento muy fuerte en el que se me acabaron completamente los recursos, a mediados o fines de agosto. Es cuando me acerque a Federico Arreola y le expuse la situación, proponiéndole que le entrara al proyecto. A los pocos días me dijo que sí, fue la salvación, pero tampoco la vio fácil. Nosotros seguimos con la idea del cine sabiendo que era imposible.......


SR–Parte del riesgo de llegar a los cines era entrar al sistema de distribución de las majors que apuesta a funcionar por fin de semana y no al largo plazo...

LM–Exacto. Estás entrando a la guerra del mercado...

SR–Y a la boca del lobo...

LM–Incluso escogimos la fecha de estreno, el 16 de noviembre, con Warner Brothers porque casi no había estrenos y ellos no tenían nada. Ahora ellos metieron El asesinato de Jesse James y a la otra semana Beowulf , con muchas más copias de las que planeaban y otros majors también, con toda la publicidad y nosotros cero. Si fuera un proyecto que nada más veo desde el punto de vista comercial nada más a lo mejor no le entro pero el cine te da un escaparate que el DVD no te lo da, y aquí de lo que se trata no es de hacer dinero, ojalá se haga para poder pagar todas las deudas que tenemos.

Yo me siento responsable con toda la gente que de buena fe nos ha dado dinero. Pero más importante que eso es poner en evidencia las mentiras y desinformación de la televisión e informar a la gente por una sola razón: la dignidad humana. Pienso que todo ciudadano tiene derecho a la información, que la desinformación de los medios es un crimen, si ellos hubieran informado imparcialmente a lo mejor ya me hubiera ido a hacer otra película a Hollywood.

SR–¿Cuál fue tu afán en este punto de tu carrera? ¿Cómo te sientes?

LM–He dejado de ganar dinero, pero he ganado muchas otras cosas, para mí ha sido como un renacimiento. Creativamente, humanamente, pasionalmente, la conexión con tu país, hacer algo importante por él, darle algo a la gente que está desesperada frente a un gobierno que le vale madres el pueblo. Ayer invité a un par de panistas a ver la película y salieron muy impactados porque creían que habían ganado y ahora se dan cuenta que el PAN es lo mismo que el PRI. La posibilidad de despertar conciencias, no de que cambien de partido, para mí es la única posibilidad de real transformación en México. Eso son mis premios Oscar.

SR–¿No tienes esa duda de pronto de ser el equivocado, el terco, ante el alud mediático que se vino previo a la elección pero que incluso después se reforzó...

LM–No. Yo soy el loco, porque es David contra Goliat, pero creo en la verdad y en su enorme poder. A los medios no los veo mucho porque me duele el estómago, me causa repugnancia su cinismo. Mentir cínicamente día tras día me causa repugnancia y esa repugnancia no te causa ni confusión ni miedo.

SR–Simplemente al mirar la película ya en pantalla, ¿qué conclusiones sacas?

LM–Es la primera vez que estreno una película sin haberla exhibido previamente. Y como espectador me conmovió. Me impactó ver el nivel de deshonestidad que hay en este país. Pero lo que más me impacto es una parte de la película donde cuestiono a López Obrador sobre el plantón de Reforma, pues lo que más le importa a este hombre es impedir la violencia en este país, no parar el fraude. Y eso es lo que ellos no aprecian, porque lo que están provocando es la violencia. En postproducción un técnico, de filiación panista, me dijo que ninguna película antes le había hecho cambiar su forma de pensar. Son las cosas por las que yo entiendo que me tienen miedo.....


SR–¿Cuál es tu opinión de López Obrador como personaje?

LM–Es un hombre muy generoso. Realmente siente profundamente las cosas. A través de la película la gente va a poder verlo en una luz que no se ha visto públicamente por la deformación que hay en los medios. Además es absurdo porque sé que muchos empresarios están enojados con Calderón, que ni a Televisa le ha ido bien con él y estoy seguro que todo el país hubiera estado mejor, incluso ellos. Por eso te digo que son ciegos. Lo que tiene López Obrador es que es muy responsable.


´´...frente a la irresponsabilidad y el valemadrismo del gobierno, al que no le importa la gente, esto puede incendiarse y la culpa la van a tener ellos. López Obrador nunca va a caminar por el camino de la violencia, eso me consta, pero mucha gente ya está desesperada y la desesperación es peligrosa.

Luis Mandoki´´